jueves, 12 de marzo de 2015

NOTAS DE JEAN HEAP-DISCÍPULA DE GURDJIEFF



Nosotros nunca preparamos nuestro instrumento

Le damos la bienvenida a la comida para evitar pensar y comenzar a soñar despiertos. Debemos llegar a estar un poco más conscientes acerca de cómo nos movemos interiormente: sin ninguna dirección ni intención. Podemos hacer progresos estudiándonos a nosotros mismos. Es un trabajo muy grande recordarnos a nosotros mismos. ¿Qué recordamos? ¿Somos capaces de recordar el cuerpo, somos capaces de relajarlo? ¿De tener alguna sensación, de tener conciencia? No podemos realmente decir que tenemos una presencia, pero, algo puede estar allí, consciente de lo que está pasando, aprendiendo, observando exactamente lo que nos toma, qué es lo que tiene poder sobre nosotros y qué es lo que no lo tiene tanto; porque todo tiene algún poder sobre nosotros.

EXPERIMENTO: Durante el ayuno o al ingerir algún alimento, tomemos sensación del cuerpo, eso pone las cosas de relieve. Podemos estar conscientes por cierto tiempo, conscientes del proceso de comer y nada más. Entonces mi cabeza comienza a comentar y luego mi conciencia, mi observación desaparece. Esa es la prueba de que estoy observando con mi cabeza, eso es algo que cualquier idiota puede hacer, y no nos da mucho.

¿Cómo estar allí con cierta conciencia? Si tuviera algo de conciencia podría ser capaz de ver qué parte de mi está comiendo (nutriéndose), qué parte de mí se está yendo hacia las asociaciones. Nuestra mente puede observar nuestras funciones instintivas con relativa facilidad mientras comemos. Puede observar un poco nuestros sentimientos, observar y no observar, y entonces tan rápido como cambia de dirección, no queda nada de la atención.

Es como un chispazo de luz y entonces mira algo más. Esto significa que el chispazo de luz viene de la mente, que no es una luz real sino algo ordinario y que nunca me puede dar lo que necesito, o sea, el conocimiento real de lo que Yo Soy. Poner el acento en llegar a estar consciente de sí mismo, si nos abocamos seriamente a ello, nos dará la presencia.

¿Cómo puedo llegar a estar más consciente de mí mismo? ¿Y qué pasa cuando no lo intento ESFORZÁNDOME? Puedo estar consciente de ciertas cosas exteriores, pero no de lo que me rodea, de hecho prácticamente nunca Soy, pero puedo estar consciente de lo que me preocupa, de lo que va a pasar, de lo que quiero, pero aun no tengo la conciencia de qué momento de mi vida estoy viviendo ahora, solo muy parcialmente de forma habitual.

No tengo conciencia de mi cuerpo. No experimento mi cuerpo, como si fuera de otra parte que no sea de mi mente, o sea, la sensación de mi cuerpo. Para ello debo estar recogido y tener un fuerte despertar de la atención. La mitad, o las tres cuartas partes de mis percepciones son pasivas: medio dormido, mi mente hace asociaciones pasivamente. Esta es la causa de que nunca tenga momentos intensos en mi vida. La vida está allí todo el tiempo, y yo no estoy con ella. Yo no puedo estar con ella, vivir con ella, si yo no estoy consciente de mí mismo un poco. Estar dormido no es vivir a pleno. Sueño y estos sueños me interesan mucho, pero yo no me siento a MÍ MISMO.

Si comenzara a estar consciente de mí mismo, podría despertar. ¿A qué yo estoy despierto? Si no estoy consciente de lo que observo, ¿quién lo hará? Lo repito: la mente, pero nada más, la mente lo hará como lo hemos dicho, prestará atención en cierto momento a lo que está escrito en el libro o a lo que se habla. Ud. observa que su mente está interesada en sí mismo, pero ¿a qué parte de sí mismo?

La mente está siempre siguiendo nuestros deseos pasivamente: lo que nos gusta y lo que no nos gusta, todo lo que experimentamos de la vida exterior. Pero sobre nosotros mismos como una realidad, lo que somos y lo que podemos llegar a ser, solamente la parte de nuestra mente, que no es pasiva como la que habitualmente utilizamos, puede realmente estar interesada. El anhelo de conocer, de conocer REALMENTE algo, está en la parte de la mente que no es asociativa como la otra, que puede cambiar hacia la dirección interior y mantener, cierto compromiso con la relajación y sensación del cuerpo, que nos hará menos dormidos.

Es importante comprender un poco estas cosas en nosotros mismos, comenzar con nuestro instrumento, nuestro cuerpo, tener la sensación de que alguien está tratando de reparar un delicado reloj con unas grandes pinzas y que se asombra del resultado. Nosotros nunca preparamos nuestros instrumentos, nuestros cuerpos y de que no podemos repararlos con nuestros instrumentos habituales, está fuera de cuestión. 

Todas las funciones que son indispensables de la vida exterior, el equipamiento ganado a través de la educación, de la instrucción, de la imitación, de las influencias, todas estas funciones no pueden ayudarme a encontrar algo de mí mismo de forma correcta, ellas se colocan a sí mismas en el camino y piensan que pueden hacerlo, este es el estado terrible de las cosas. Debo cambiar los lugares en mí mismo, despertar todas las partes. Debo tener un instrumento mejor, si esto no se comprende, no podremos alcanzar nada.

Cada vez que nos es dado algo diferente, tenemos EL MOMENTO para alcanzar ese instrumento diferente. Un “instrumento diferente” significa algo muy concreto: una parte diferente de la mente, menos pasiva, menos mecánica, con un mayor anhelo real de conocer algo y no, de que le sea dada información, de leer y luego olvidar. Debo darme cuenta que conozco muy poco, que comprendo muy poco, que todo el conocimiento de mi mismo está en desorden, embarrado, acerca de lo que yo soy, de lo que yo sé. Esa parte de mi mente hará preguntas que nadie puede responder, y no se satisfará con ninguna respuesta vieja.

Mis emociones ordinarias en esta búsqueda siempre me molestarán, siempre se interpondrán en el camino. Con otra parte de mis emociones yo podré anhelar llegar a ser alguien diferente, anhelar que me sea dada una libertad real, anhelar ser capaz de ser más útil, de ayudar a otros de otras formas que solo en mi imaginación. Estas partes mías, si ellas estuvieran despiertas, y ellas solo pueden ser despertadas si trato intensamente de recoger mi atención, podrán estar reunidas. La mente no puede hacerlo sola, ni tampoco las emociones por su lado. Si ellas se reúnen por la atención voluntaria, obtendré la conciencia.

Esto no lo podemos comprender por mucho tiempo. Ese es el motivo por el que les pregunto cómo se preparan, cómo comienzan el día, de hecho, el esfuerzo real está siempre en la preparación. Es lo mismo en la vida. Ud. tiene que realizar una parte complicada de alguna tarea, pero si se ha preparado bien, Ud. observa que sale bien diferente. En el Trabajo, el esfuerzo está siempre en la preparación, si ante mi tarea ¡yo puedo llegar a recoger mi atención! La atención, de ese aparato que habla y comenta todo el tiempo, no es importante que sea recogida. No puede ser recogida, ¡ni aunque trate por miles de años!

Sería inútil intentar abrir una puerta del otro lado, empujar en vez de jalar. Esto es lo que no comprendemos aún, no comprendemos que este trabajo no puede ser hecho con las funciones comunes y esto es porque no nos han dado ninguna instrucción acerca de la relajación, de tratar de estar conscientes, de llegar a ser activos en sí mismos, de mi atención, consciente de mis pensamientos dirigidos hacia el trabajo.

La primera atención dirigida hacia mí: ¡El Trabajo! ¿Qué es? ¿Dónde lo encontraré? Yo trabajo, si trabajo completamente; yo intento, si intento completamente, para mi evolución. Mis esfuerzos pertenecen a mi evolución.

Estamos sepultados en nuestra pasividad. No tememos a la muerte. La muerte no nos cambiará mucho, ¡ya estamos muertos!

Ahora yo estoy separado de todas mis partes. Si digo “Yo soy”, ¿hay alguna sensación de Presencia? No puedo decir que esta sensación es “YO” pero debo estar consciente de la presencia en mí y estar consciente de los pequeños “yoes” de los cuales estoy desapegado ahora. No estoy realmente presente si no ceso de funcionar en mi personalidad. Si no funciono completamente, no soy nada. Debemos respetar mucho la sensación de presencia. Toda nuestra esperanza, todo nuestro futuro descansa en ella. No es posible para ella manifestar algo, solo arrojar luz sobre la irrealidad de la existencia, lo que hará cada vez más.


No hay comentarios:

Publicar un comentario